10 RECOMENDACIONES PARA ARTICULAR UNA ACCIÓN INTERNACIONAL LOCAL

 

La emergencia de los gobiernos locales en la escena internacional es un proceso que se extiende y que se generaliza rápidamente. Hoy en día un gobierno local no puede ejercer sus competencias, prestar los servicios públicos que le corresponden, atraer inversiones extranjeras, promocionar su capacidad productiva, desarrollar el modelo de entidad que desea impulsar, sin entrar en una dinámica de relaciones internacionales.

Hoy por hoy los gobiernos locales utilizan su vinculación con el exterior como una herramienta que les permite generar mayores oportunidades de desarrollo y de participación en los procesos de integración y globalización económica que tienen lugar en la esfera mundial.

En este contexto, como aportación del Seminario “La Internacionalización de los Gobiernos Locales, una Tarea Compartida” celebrado el 7 de julio de 2017, las instancias convocantes: Secretaría de Relaciones Exteriores, a través de la Dirección General de Coordinación Política, la Alianza Euro Latinoamericana de Cooperación entre Ciudades, AL-LAs encabezada por la Coordinación General de Asuntos Internacionales de la Ciudad de México y la Universidad Nacional Autónoma de México a través del Programa Universitario de Estudios sobre la Ciudad y del  Centro de Estudios Municipales y Metropolitanos de la FES Acatlán presentamos las siguientes diez recomendaciones para articular una acción internacional local más estratégica y con visión de largo plazo. Estas recomendaciones no pretenden constituirse como una receta, sino como lineamientos generales para que cada gobierno local diseñe su propia estrategia como traje a la medida, conforme a sus prioridades y vocaciones territoriales.

 

  1. La acción internacional local debe ser congruente con la política exterior

El Estado-nación ya no se configura como el actor exclusivo de las relaciones internacionales. La creciente interdependencia entre los países, favorece la emergencia de otros actores que participan e inciden en el escenario internacional. Ejemplo de ellos son la sociedad civil organizada, las organizaciones no gubernamentales, los grupos empresariales, el poder legislativo y los gobiernos locales. Estos últimos cobran especial importancia, partiendo del hecho que las ciudades, provincias y regiones son un núcleo importante del que se nutre la articulación de una verdadera comunidad global.

Si bien la política exterior de México es facultad exclusiva del Ejecutivo Federal, la acción internacional de las autoridades locales tiene su propia vocación frente a las relaciones internacionales de los Estados-nación. Más que competir, ambas esferas se complementan y se enriquecen desde una visión de Estado.

 

  1. Conocimiento y sensibilidad de las oportunidades y prioridades globales

Para que la acción internacional sea efectiva y coadyuve a encontrar socios estratégicos, es necesario estar conscientes de las oportunidades y espacios de participación que ofrece el entorno global a los gobiernos locales de cara a su propia realidad local.

Igualmente es importante conocer y considerar el marco jurídico-institucional tanto interno como internacional en el que se desenvuelven los gobiernos subnacionales.

 

  1. Priorizar el bienestar del ciudadano como objetivo fundamental de la acción internacional

El objetivo último de cualquier acción internacional en la que participe un gobierno local deberá ser la mejora de las condiciones de vida de la población que habita en su territorio.

La acción internacional no es un fin en sí mismo, ni la panacea para solucionar los problemas del territorio, sino un medio que a través de la acción pública contribuye a alcanzar un mayor bienestar y desarrollo para las comunidades.

 

  1. Propiciar una gobernanza multinivel

Es necesario generar las condiciones favorables para que la acción internacional de las localidades se de en un ambiente de colaboración con los otros órdenes de gobierno, el poder legislativo y organismos internacionales.

 

  1. Institucionalización y diseño de un marco estratégico

Para ofrecer un real valor añadido y tener perspectivas de impacto y sostenibilidad, las relaciones internacionales de una localidad necesitan situarse en un marco estratégico que derive de una política pública internacional ligada con las vocaciones del territorio.

En este contexto, se recomienda considerar la creación de oficinas o unidades especializadas en relaciones internacionales con sustento y personalidad jurídica que desde una visión transversal se coordinen al interior del gobierno local y con los demás actores del territorio.

 

  1. Promover una colaboración multiactor

El gobierno local no puede ser el actor único de la internacionalización de un territorio. Para poder trasformar su acción internacional en una política pública, deberá integrar y articular a los diferentes actores (sociedad civil, líderes de opinión, academia y sector privado) que operan en el territorio.

Se recomienda considerar la articulación de espacios que aglutinen a estos actores para propiciar el acompañamiento, consenso, legitimación y continuidad de la estrategia internacional, tanto en su diseño como en su instrumentación.

 

  1. Generar relaciones de solidaridad, complementariedad y cooperación horizontal

Las relaciones internacionales entre gobiernos locales basadas en la subordinación y el asistencialismo están cada día más rebasadas, hoy por hoy, estas relaciones han de ser más de cooperación horizontal y de solidaridad recíproca.

Es importante enfatizar que uno de los principales instrumentos de vinculación con el exterior que tienen los gobiernos locales mexicanos es la formalización de acuerdos interinstitucionales de hermanamiento y cooperación específica, mismos que deben realizarse en términos de mutuo beneficio, afinidades y complementariedad en visiones y prioridades de desarrollo, a fin de que esta cooperación sea durable y tenga un impacto positivo en el desarrollo local.

 

  1. Buscar la vinculación internacional y el intercambio de mejores prácticas a través del trabajo en redes

Los gobiernos locales requieren tejer alianzas que les permitan generar la masa crítica suficiente para participar e incidir en la toma de decisiones sobre temas que les competen e interesan en la agenda internacional (Agenda 2030, cambio climático, desarrollo urbano, movimientos migratorios, etc.), para lo cual es indispensable el trabajo de cooperación horizontal en redes.

 

  1. Comunicación efectiva de las relaciones internacionales locales

Uno de los grandes retos de la acción internacional es que la población perciba en ella una oportunidad y beneficios tangibles. Para lograrlo, se requiere de una intensa comunicación al interior de los gobiernos, así como con la ciudadanía.

Es necesario prever una comunicación previa a un proyecto internacional o viaje de alguna autoridad local y presentar además los resultados de los proyectos y viajes al exterior de cara a la ciudadanía.

 

  1. Medir el impacto y darle contenido financiero a la internacionalización

La internacionalización local debe de ser vista como una inversión no como un gasto. Un testimonio de una práctica de buena gobernanza cuyos resultados se plasman en bienestar social, cooperación y la posibilidad de llevar el mundo a la comunidad y la comunidad al mundo.

Bajo esta premisa es importante darle un contenido financiero a la política pública internacional y crear herramientas metodológicas para medir el impacto positivo de la acción internacional en el desarrollo local, tanto en términos cuantitativos (inversión extranjera, cooperación descentralizada, turismo internacional, movilidad estudiantil, etc.), como en términos cualitativos (incidencia en temas de la agenda internacional, intercambio de conocimiento, experiencias y políticas públicas, solidaridad internacional, etc.).